ESTA ES LA HISTORIA
DE LOS QUE AMAN EL MAR
Todo comenzó en 1970, cuando el ingeniero Fortunato, combinando los conocimientos de ingeniería con la experiencia y el saber hacer adquiridos en Canadá por dos de sus colaboradores, diseñó dos pequeñas embarcaciones de fibra de vidrio de 4 y 5 metros –en aquel momento una novedad para la producción de embarcaciones en Italia. Los dos modelos llamados Skino y Ciaula, una vez lanzados al mercado, lograron inmediatamente un éxito moderado, lo que llevó al ingeniero a continuar con la empresa y fundar el primer astillero siciliano de fibra de vidrio en 1971, bajo la marca Eolo. El nombre elegido por el ingeniero marca simbólicamente medio siglo de vida de la obra.














